martes, 13 de junio de 2006

¡Entrandole al club 21!

He tenido un cumpleaños por demás satisfactorio, desde practicamente que comenzó, previo a él tuve la satisfacción de entrar a Vino Nuevo, agradecerle a Dios y encontrarme con mis amigas y amigos, gente maravillosa que me han ayudado en gran manera a fortalecer mi fé como una persona cristiana.

Y pues el 11 de Junio llegó conmigo despierta, frente al monitor. Estuve platicando con Merman y Lizaln, personas en linea, del primero no tengo para nada de que quejarme, puesto que se ha portado siempre muy atento conmigo y de Lizaln, ella ha sido una excelente amiga, ocurrente y muy buena onda. Platicamos bastante y le mostré fotos mias, pero cuando me comentó que tenía dientes blancos y rectos casi me da un ataque de risa, en serio, la verdad es que tengo dientes disparejos, tal vez no se note mucho salvo que ria abiertamente. Pero Liz hizo su punto al marcarme que me pongo muy por debajo muy seguido.

Pasadas la una de la mañana llega mi padre, y me da mi primer obsequio: una playera de la selección mexicana. En realidad trajo para todos pero eso solo hizo el regalo aun mejor.

Poco despues, a las dos de la mañana que entró él empezó la verdadera celebración. Pude platicar bastante con él, motivo de mis desvelos. Recibí un poema precioso cuyo titulo esconde un significado estrechamente ligado conmigo y tal gesto de creatividad lo atesoro muchisimo. Además de una grabación, que costó sus horitas y varios intentos para lograrlo bajar, le bastó menos de un minuto para conseguir enternecer a mi corazón de gran manera. ¡No cabe duda! Apenas han pasado unos dias y ya hemos tenido un acercamiento asombroso, camara y microfono, con altas dosis de cyber-abrazos y "I <3>_>

Pedí unas bocinas de regalo, a decir verdad, pensaba en no pedir nada, y obedecer las palabras de papá de que si queria dinero no esperarara NADA pero me dije para mi, lo que sea que se me de se puede vender... pero conociendome no soy capaz de hacer eso con todo cinismo o incluso esa posibilidad se me cerraría.

Yo me quedé como hasta las cuatro de la mañana, tal vez un poco más platicando con él, y aun asi me dormí como a las seis, para despertar a las ocho y media a comprar el periódico y ya dos horas más estarme con la familia viendo futbol soccer, el primer partido de Mexico contra Iran, quienes me dieron una gran satisfacción al ganar 3-1.

Al terminar el partido salimos rumbo al "hoyo" a comprar las bocinas, todos nos fuimos con "la verde" bien puesta. Ahí nos encontramos a varias personas que tambien la portaban, me agradó tener a mi papá de mi lado y que al final hubiera cedido y se la hubiera puesto, pese a que según el la playera le apretaría debido a la talla.

Llegamos y fue ver otro partido y en general por unas dos horas, tirar hueva, todos andabamos desvelados y nos cayó muy bien el descanso, despues partimos a recojer a mi tía, había un cambio de planes.

La verdad es que la idea de la carne asada fue mia, pero al aprecer no fue tan buena idea, mis padres hablaban de ella como algo que no habían disfrutado als últimas veces que se hizo (y con justa razón), y luego en general el trabajo que requer?1a y por último estando recostada con mi mamá remató que aún no tenían lo necesario y que era ira comparrlos. Por otro lado ya era algo tarde y mi tía la teniamos hambriada pues pasaríamos por ella, asi que yo sugerí mejor un restoaran, se me ocurrió la parrillada de la hacienda de los Gomez...

Hecho, fuimos y pedimos, tras un buen rato de espera nos taren los frijoles charros, tras otro rato igual o más largo, llega finalmente el sirloin y la carne al pastor. Una vez que terminamos, nos aventamos una pequeña charla en el lugar. "no estuvo mal, pero la carne asada en el patio hubiera estado mejor" fue en lo que giró la conversación, lo que me hizo desear darme de topes contra la primera pared que viera, porque yo DESEABA esa carne asada y la cambié por queder darles gusto, para que al final digan que la charla, el ambiente no se compara al estar en el patio de nuestra propia cosa, uan opinion muy valida y que comparto por completo, ademas más que carne, estuve tentada a pedir una discada, pero igual, el momento se disfrutó ¡y es más! me llevé un recuerdito del restaorante ese: UN GOLPANAZO EN LA CABEZA. Lo que pasó es que al andar de descuidada me avneté hacia atras y golpié mi cabeza con una columna de ladrillos que yo ni me acordaba que estaba ahí XD

Luego fuimos a recojer unos gatitos del patio de mi tía para que los llevara al la tienda de animales de Soriana. Un pendiente menos, ya despues de eso volvimos a casa.

Cristian me dió tambien un regalo: un hermoso perrito de peluche, muy suave, muy lindo.

Comop podras ver, la pase muuuy bien ^_^